Por Martín Camps.

El vínculo entre fútbol y literatura no es novedoso, pero es siempre una pasión de multitudes. En Por amor a la pelota: once cracks de la ficción futbolera,  los once autores convocados animan la discusión en torno al fútbol desde las gradas de la literatura.

En Por amor a la pelota: Once cracks de la ficción futbolera se compone una selección de una escuadra de narradores/as e incluye además un prólogo y entrevistas reveladoras sobre la cancha narrativa. Los convocantes son los profesores Shawn Stein y Nicolás Campisi que hicieron un scouting de los numerosos cuentos que tocan este tema de interés nacional/pasional y ofrecen una nómina robusta.

De Argentina, la escritora Selva Almada en “La camaradería del deporte” construye un cuento sobre los hinchas (que según dice Galeano, su nombre proviene de los que hinchaban de aire los balones). Almada recrea el lenguaje vivo de los aficionados (tifosi, en Italia), sus riñas vikingas contra los contrincantes y traza un memorable personaje: “La Shakira”, un travesti que acude a las gradas con tacones de aguja y cuyo “amor por el fútbol empezó en las canchas pero siguió en los vestuarios” (p. 27). Por otra parte, en el cuento “Como la vida misma” del boliviano Edmundo Paz Soldán se narra un asesinato en plena cancha, enfrente de los aficionados, a cargo de “Gery” Portales que se arma de un tubo para batir a su contrincante, el faulero Aldunante. Dice el árbitro en este cuento sobre su labor de juez: “Alguien debía vestirse de negro y hacer de Dios para las multitudes dominicales” (p. 40).

Miguel Hidalgo Prince: “La página también es como una cancha, con sus reglas, sus márgenes, sus misterios y sus claros objetivos”

El cuento del brasileño Sérgio Sant’Anna “En la boca del túnel” es el más “técnico” o ensayístico, con información de alguien que conoce profundamente los entresijos del fútbol, sus jugadas de pizarrón y metafísicas. El autor revela que saber patear una pelota con precisión, en nuestros países, puede cambiarle el destino a cualquiera. Dice también una verdad tecnológica con respecto al registro documental de los partidos: “Con la cinta de video, el fútbol entró en la Historia del Arte” (p. 58). Sobre la condición del crack acota que su habilidad consiste en ver el futuro: está siempre “un poco adelante de los demás”, donde las cosas van a acontecer. En el fútbol, como en la narrativa, se puede decir lo que apunta Sant’Anna: “En el fútbol uno nace para ser bueno o no” (p. 75). El ecuatoriano José Hidalgo Pallares en la historia “El ídolo” denomina como “noveleros” a los hinchas que se aparecen únicamente en los partidos decisivos y relata la historia de un portero que traiciona a su equipo dejándose anotar goles y también como venganza de sus compañeros que lo hastiaban. “El extremo fantasma” del mexicano Juan Villoro deja entrever la pasión del autor por el fútbol. Villoro jugó para el Pumas (Juvenil AA) y tiene dos libros de crónicas formidables: Dios es redondo y Balón dividido. El cuento relata el destino de un jugador que es superado por lesiones y debe renacer como entrenador de un equipo de segunda división (“Los rayados”) al que se compromete llevar a la primera división, pero los intereses de los dueños y la corrupción del club se lo impiden.

La selección incluye otros cuentos como los del chileno Roberto Fuentes (“Un huevón más”), del colombiano Ricardo Silva Romero (“El Cucho”). De Paraguay, Javier Viveros (“Fútbol S.A.”); de Perú, Sergio Galarza Puente (“Donde anidan las arañas”). De Uruguay, Carlos Abin (“El último penal”) y un último cuento del venezolano Miguel Hidalgo Prince con “Tarde de perdedores” quien en la entrevista habla de cómo leía las crónicas de fútbol y en su mente veía jugar a Cruyff, Platini, Garrincha, porque “La página también es como una cancha, con sus reglas, sus márgenes, sus misterios y sus claros objetivos” (p. 267).

En las entrevistas los autores hablan también de otros cuentos fundacionales que nutren sus historias futboleras como los de Mario Benedetti, Roberto Bolaño con su texto “Buba” o Roberto Fontanarrosa y su cuento “19 de diciembre de 1971”.

La selección de cuentos representa a todos los países de la confederación de asociaciones de fútbol sudamericanas, además de México, pero no incluye a caribeños o centroamericanos, donde el fútbol también es moneda corriente. El libro fue recientemente traducido al inglés bajo el título Idols and Underdogs (2016), publicado por Freight Books en el Reino Unido.

En resumen, estos once convocados a una selección literaria animan la discusión en torno al fútbol desde las gradas de la literatura. Todos los autores son hinchas de equipos (con excepción de Selva Almada), pero ante todo son escritores que driblan el baloncito entintado de la punta de la pluma con una sólida trayectoria narrativa. Este libro puede animar o reanimar jugadas o anécdotas futbolísticas, en todos los cuentos se puede escuchar el lenguaje de las hinchadas de cada país y la pasión que desata este juego que calienta las pasiones del teatro humano que espejea en la cancha.

Stein, Shawn y Campisi, Nicolás . Por amor a la pelota: once cracks de la ficción futbolera. Santiago, Chile: Editorial Cuarto Propio, 2014. ISBN: 978-956- 260-690- 5.

Martín Camps

Martín Camps

Colaborador

Poeta y profesor de literatura. Ha publicado cinco libros de poesía, su último libro es Los días baldíos (México: Tintanueva). Ha publicado poemas en varias revistas, sus últimos poemas aparecieron en la revista Modern Poetry in Translation. Actualmente es profesor de literatura en la Universidad del Pacífico en California.

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